Recetas
Risotto de calabaza y queso azul
Los secretos para un risotto perfecto
¿Cómo puedes saber si el arroz está en su punto? Esta es una de las preguntas más frecuentes a la hora de preparar un risotto.
Si el grano está demasiado duro o demasiado blando, puede que el resultado final del plato no sea tan satisfactorio. Si tienes dudas, puedes probar a cortar un grano de arroz y comprobar si está tierno por fuera y sólido en el interior. Pero, si estás acostumbrado a preparar risottos, es más sencillo, simplemente tendrás que catar el plato hasta que los granos de arroz Arborio o Carnaroli de Scotti estén al dente. Si consigues que el arroz quede en su punto, habrás alcanzado gran parte del éxito de un risotto.
Este Risotto de calabaza con crema de queso azul tiene otro gran protagonista: el queso. Para conseguir la mayor cremosidad, te aconsejamos que añadas la crema de queso al final del proceso, cuando hayas retirado la sartén del fuego. El propio calor del arroz ayudará a mezclar bien todos los ingredientes.
¿Es la primera vez que cocinas un risotto con un queso diferente al queso parmesano? Te invitamos a descubrir nuestra Guía de quesos y risottos.
Ingredientes
Para la crema de queso:
- 100 g de queso azul (roquefort o cabrales)
- 100 ml de leche
- 15 g de mantequilla
- Aceite de oliva virgen extra
- Una pizca de nuez moscada
- Sal
Para el risotto:
- 300 g de arroz para risotto de Scotti
- 1 cebolla mediana
- 1 calabaza de 1 kg
- 1 l de caldo de pollo o de verduras
- 100 ml de vino blanco
- Romero fresco picado
- 1 guindilla (opcional)
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
Elaboración
Para la crema de queso azul:
- Derrite el queso azul en una sartén, a fuego lento.
- Vierte la leche sobre el queso derretido y remueve con una espátula hasta conseguir una mezcla ligera y uniforme, sin grumos.
- Añade un poco de aceite de oliva y después un poco de mantequilla. Sigue removiendo, suavemente, a fuego lento.
- Espolvorea la nuez moscada, prueba y rectifica con sal y pimienta si es necesario. Reserva.
Para el risotto:
- Corta la cebolla finamente. Caliente aceite en una sartén y sofríe la cebolla picada hasta que esté dorada.
- Pela y pica la calabaza en dados pequeños.
- Pica muy finamente la guindilla (opcional).
- Añade la calabaza cortada a la sartén, la guindilla, un puñado de romero y sal al gusto. Rehoga durante 3 minutos.
- Añade el arroz y remueve hasta incorporar todos los ingredientes.
- Vierte medio vaso de vino y sube el fuego para lograr que el alcohol se evapore.
- Reduce el fuego nuevamente y añade poco a poco el caldo. Debes calentarlo previamente.
- Remueve despacio hasta que el arroz absorba todo el líquido y añade otra toma de caldo. Repite hasta agotar el caldo o lograr la consistencia cremosa deseada.
- Prueba y rectifica de sal.
- Añade la crema de queso cuando el arroz esté en su punto. Remueve para mezclar por completo.
- Sirve recién hecho.